sábado, 1 de mayo de 2010

Chamaerops humilis "vulcano"


Este es mi artículo publicado en Espádice nº 16

Dentro de la familia Arecaceae, subfamilia Coryphoideae, tribu Corypheae,
subtribu Thrinaceae, tenemos el género Chamaerops con una única especie,
Chamaerops humilis, aunque con diversos ecotipos o variedades, entre otras:
“argentea” o “cerifera”.
“microcarpa”.
“gracilis”.
“elatior”
“arborescens”. o “elatior”
“glauca”.
“dactylocarpa”.
“oblongata”.
“vulcano”.
“compressa”.
“humilis”.
Aunque oficialmente en la Check list de Kew R. B. Garden solamente se reconocen las variedades “humilis” y “argentea”, creo que tiene suficientemente entidad e importancia muy reconocida a nivel del viverismo la variedad “vulcano”. El Chamaerops es la única palmera de Europa (si se exceptúa a Phoenix theophrasti de Creta). Es una palmera multicaule, aunque la variedad “elatior” suele tener un solo estípite. La mayoría de los estípites se levantan poco del suelo, pero los que crecen sin estorbos desarrollan estípites altos, frecuentemente sinuosos y cubiertos de fibras inicialmente negruzcas, los cuales pueden alcanzar 6, 7 y hasta 9 metros de altura, y alrededor de cuya base se producen característicamente rebrotes. Sus
hojas son palmadas, de 80 o más centímetros de diámetro, con 12 a 15 segmentos puntiagudos, frecuentemente bífidos, creciendo erguidas cada una sobre un pecíolo delgado y espinoso, tan largo como el limbo. Es una palmera dioica, es decir, produce pies femeninos y masculinos, aunque también pueden aparecer pies hermafroditas. Las flores son pequeñas y amarillas, con 6 tépalos, las femeninas con tres carpelos libres y 6 estaminodios; las masculinas con 6 estambres de filamentos cortos. Forman racimos densos, envueltos al principio por una espata roja. Florece en primavera. Da frutos globulares, llamados palmiches, semejantes a pequeños dátiles, de unos 2 cm de diámetro, color amarillo parduzco y con un fuerte olor a queso rancio. Estos frutos atraen a diversas especies de mamíferos salvajes (zorros, tejones, conejos...) que actúan como dispersores de sus semillas. Los palmiches son ricos en taninos, astringentes, así que se consumen para combatir la diarrea a pesar de su sabor áspero. Además de los cogollos, a los que
propiamente corresponde el nombre de palmito, y los frutos, se aprovechan las hojas, usadas en cestería o para fabricar escobas, y las fibras que se extraen de ellas, empleadas por la industria papelera y textil. Las espatas tiernas, cerradas
aún, se llaman en el sur de España «higas», y también se consumen.En otro tiempo, y aún ahora en el Norte de África, se aprovechaban las raíces por su riqueza en azúcar como sucedáneo de la zarzaparrilla.
Por su origen mediterráneo, tolera climas suaves y/o templados, con inviernos fríos y húmedos y la sequía estival, y por lo general crece en las laderas secas. Es una de las palmeras más resistentes, puede tolerar las heladas de invierno por debajo de los -12 °C
"La variedad o cultivar “vulcano” tiene un origen dudoso, desconociéndose con certeza si surgió de la mutación de un ejemplar silvestre o de un ejemplar cultivado, pero podemos ubicarlo en la minúscula isla de Vulcano, una de las islas Lipari, en el mar Mediterráneo, al norte de Sicilia. Las diferencias respecto de la Chamaerops humilis "vulgar" son, entre otras, que crece como una planta compacta, tipo bonsai y con hojas cortas, más coriáceas, de punta poco afilada, de un verde herbáceo por el haz y blanquecino en el envés y con pocas espinas en su raquis. En los últimos años ha llegado a ser cada vez más popular entre los coleccionistas europeos (muy solicitada por alemanes y franceses) y por esto tiene un potencial enorme como planta ornamental. En cultivo es tan fuerte y resistente como cualquier Chamaerops y una de las mejores palmeras para climas templados. En nuestras condiciones puede llegar a tener dos floraciones, una posterior a las lluvias de los meses de septiembre y octubre y otra, y en función del vigor de la planta, en primavera. Es una palmera fácil de cultivar, germina en 30-40 días si la semilla es fresca. El crecimiento en maceta es lento, desarrollándose con más alegría al plantarla en el suelo, alargando aquí bastante más las hojas, sobretodo el peciolo, que incluso, puede tener más espinas.